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Escoger el material adecuado para el suelo del hogar es una decisión importante. De esto dependerá el resultado estético, pero también la calidad de los acabados y su resistencia. Al final, es una superficie que convivirá en la vivienda y debe prestar un próspero servicio a todos los efectos.

Cantidad de personas se decantan por el suelo de tarima, ya que tiene un aspecto muy similar al parqué, pero es más económico, fácil de mantener y resistente. El problema llega cuando hay que tomar una decisión sobre el tipo de superficie, ¿con bisel o sin bisel? Esta es la pregunta que trataremos de resolver en este artículo.

¿Qué es el suelo de tarima?

El suelo de tarima contiene unas largas láminas de madera que se ubican en rastreles nivelados y se han colocado sobre el forjado. Cuando hay una separación con este, ejerce un excelente poder aislante que es muy beneficioso para el bienestar en el hogar y para el ahorro energético.

Encontrarás varios tipos de tarima en sitios especializados como https://www.briconeo.es/ y la principal clasificación que observarás es la que se divide en los modelos con bisel o sin bisel. Se trata de la primera decisión que debes tomar antes de escoger la superficie definitiva para tu pavimento.

Diferencias entre tarima con bisel o sin bisel

El suelo que se presenta con bisel es el que mantiene un desnivel que va a incidir en la separación de unas lamas a otras. Se muestra como una ligera inclinación que se pronuncia a lo largo y ancho de cada una de las piezas y que va creando este efecto, de forma que se observe una diferencia visual en cada una de ellas. Por su parte, la tarima no biselada se va a mostrar totalmente plana y lisa, sin que se encuentren diferencias entre las piezas.

Esto trae consigo varias discrepancias entre un estilo de pavimento y otro, pues el bisel afecta en diversos factores que debes conocer antes de tomar una decisión. Te mostramos cuáles son, a continuación.

Diferencias visuales y estéticas

La primera diferencia y la más evidente va a estar en el sentido estético de la superficie. Lo que consigue el bisel es que parezca más realista, pues los desniveles van a imitar al efecto que se crea en los suelos que son de madera maciza o de espiga. De esta forma, parece más sofisticado, cálido y elegante. No obstante, cuando se quiere encontrar unidad en el diseño y más homogeneidad visual, será el suelo sin bisel el que lo aporte.

Diferencias de tipo técnico

En el aspecto técnico también podemos encontrar algunas similitudes o diferencias. Por un lado, ambos tipos de suelo se van a instalar de la misma forma sin que uno presente más dificultad que el otro. En cambio, los suelos biselados pueden ayudar a disimular algunos fallos en las juntas y esto proporciona un acabado final más depurado. Se trata de pequeños errores en su calibración que tampoco suelen ser muy perceptibles a simple vista.

Facilidades en la limpieza

¿El suelo biselado acumula más suciedad a causa de su desnivel y es más complicado de limpiar? Esta es una de las grandes preguntas. Lo cierto es que aquí no encontramos grandes diferencias entre un tipo de superficie y el otro. La inclinación del biselado será, como mucho, de 1 mm, por lo que es muy complicado que pueda marcar una diferencia ante una pendiente tan poco significativa.

Los tipos de bisel

Ahora ya sabes qué es un suelo biselado o sin bisel y cuáles son sus principales características. Sin embargo, también es importante que tomes en cuenta los tipos de bisel, ya que no todos son iguales. Estos son los más destacados:

  • Bisel clásico. Un bisel tradicional con hendiduras bastante pronunciadas que incide en la forma de cada lama.
  • Microbisel. En esta variante se aprecia menos la separación entre unas lamas y otras, con un resultado más sutil.
  • Bisel por presión. Se aplica presión para obtener el desnivel en cada lama.
  • Bisel por impresión. Se obtiene un efecto visual de bisel con la impresión de una capa que es meramente decorativa y que en realidad es lisa.

Ventajas de la tarima con bisel

  • La tarima con bisel va a ofrecer un diseño mucho más realista desde el punto de vista visual.
  • Ofrece un mayor carácter y un toque de diseño sofisticado en las lamas.
  • Una opción especialmente apropiada cuando se pretende disimular el desgaste en los pavimentos u otros problemas.
  • Es una alternativa que ofrece facilidades en el mantenimiento, bastará con aplicar una mopa o un aspirador.
  • Hoy en día se presentan con materiales o tratamientos novedosos que son repelentes de la suciedad y facilitan el cuidado del suelo.

Ventajas de la tarima sin bisel

  • Proporciona una estampa visual que se hace más homogénea y lisa.
  • Gracias a la regularidad en la superficie, los espacios pueden parecer más grandes en algunas ocasiones.
  • El procedimiento de limpieza y de mantenimiento es muy simple con este suelo que se puede acondicionar también con una simple mopa.
  • Se trata de una variante que puede proporcionar precios más accesibles porque el coste de fabricación es menos elevado.

Tarima con bisel o sin bisel, ¿cuál escoger?

Lo cierto es que la cuestión de la tarima biselada o sin bisel es más bien personal y tiene que ver con los gustos. Ambas opciones son bastante similares en cuanto a la calidad o la dificultad del mantenimiento, por lo que habrá que guiarse por el resultado estético que se quiere conseguir en el espacio. Aunque el bisel es algo más caro como norma general, se puede obtener casi al mismo precio con una técnica de bisel por impresión, así que tampoco suele influir la cuestión económica en este sentido.