Un viaje en pareja con spa es la oportunidad perfecta para dejar atrás el ajetreo, reconectar y mimar cuerpo y mente. España ofrece una gran variedad de destinos que combinan paisajes únicos, tradición termal y tratamientos de belleza local.
Los mejores destinos para disfrutar de un plan de spa en pareja
Si lo que queréis es disfrutar de una escapada romántica en pareja y disfrutar de un buen spa juntos, ojo a estos destinos que os pueden enamorar:
Ourense
En pleno corazón de Galicia, Ourense es sinónimo de agua caliente y tranquilidad. Pasear por el casco histórico hasta llegar a As Burgas, manantiales de agua a casi 70 °C junto a la Catedral, ya resulta un plan romántico: el vapor que se eleva al caer la tarde crea una atmósfera casi mágica.
Muy cerca, las piscinas termales de Outariz y Chavasqueira están separadas por género, lo que permite un ambiente más íntimo. Aquí podréis alternar baños al aire libre con chorros de masaje, saunas de leña y cascadas de agua caliente.
Tras el circuito, da gusto sentarse bajo los sauces que bordean el río Miño, beber un agua mineral directamente de la fuente y contemplar las montañas verdes al atardecer.
Cangas de Onís, Asturias
Este rincón asturiano une la frescura de la montaña con el calor del spa. En Caldaria Termal Cangas, los vasos comunicantes entre piscinas interiores y exteriores crean una sensación única al cambiar de temperatura mientras se admira el valle de los Picos de Europa.
Los tratamientos con lodos extraídos de las playas asturianas, ricos en minerales, combinados con envolturas de algas, dejan la piel suave y revitalizada.
Después del circuito de contrastes, lo ideal es dar un paseo por el puente romano de Cangas de Onís o adentrarse en alguna ruta de senderismo cercana, donde el murmullo de los ríos y el canto de los pajarillos completan la armonía del día.
Valencia
Valencia es uno de los destinos más codiciados por quienes quieren disfrutar de una escapada romántica con spa. La ciudad ofrece multitud de opciones y cuenta con algunos de los spas mejor valorados, por lo que es garantía segura a la hora de disfrutar de una escapada en pareja para relajarse en compañía de tu media naranja.
Una de las mejores opciones para encontrar los planes para parejas con spa más románticos es descubrir lo que ofrece Experiencias Valencia, el portal de referencia para la búsqueda de todo tipo de planes en la Ciudad del Turia que cuenta con una amplia oferta de spas y centros de relax para disfrutar en pareja.
Córdoba
Con el legado de ocho siglos de cultura islámica, Córdoba conserva el arte de los baños árabes en espacios como el Hammam Al Ándalus junto al Guadalquivir o los Baños del Alcázar Califal, donde los mosaicos originales y el remate oriental transportan a otra época. En la penumbra de las salas, puedes alternar el baño caliente, templado y frío mientras la luz de las lámparas de bronce dibuja reflejos en el agua.
El guante de kessa y el jabón negro eliminan impurezas, y el masaje con aceite de azahar o de oliva deja una fragancia suave en la piel. Cuando salgáis al patio con naranjos y fuentes, vale la pena detenerse un momento, tomar un té moruno y disfrutar del silencio que contrasta con el zoco cercano.
Baños de Montemayor, Extremadura

Enclavado en la Sierra de Béjar, Baños de Montemayor es un pueblo que creció gracias a sus aguas termales. El Balneario de Montemayor, con más de cien años de historia, ofrece un circuito completo: salas de vapor, piscinas interiores y exteriores, chorros a presión y baños de barro natural. Lo más bonito es cómo se integra en el paisaje: desde las piscinas al aire libre se ve el verde de los castaños y robles que cambian de color con cada estación.
Tras la experiencia termal, se recomiendan paseos por el casco antiguo, con sus casas de entramado y el puente medieval, o excursiones sencillas por senderos donde asoma alguna cascada.
La Rioja
La fama de sus vinos ha dado lugar a spas que aprovechan los subproductos de la vid. En el Echaurren Hotel Gourmet & Spa, situado en Ezcaray, podéis relajaros en una piscina climatizada rodeada de viñedos y montañas.
El circuito de aguas contrastadas incluye sala de hielo y ducha de sensaciones, pero la joya es la vinoterapia: envolturas con mascarillas de pepitas de uva, exfoliaciones que eliminan células muertas y masajes con aceite de vino tinto rico en antioxidantes. Después, nada mejor que una ruta por bodegas tradicionales de Laguardia o una visita cultural al monasterio de Yuso y Suso, Patrimonio de la Humanidad.
Fitero, Navarra
En la Ribera navarra, Fitero guarda un balneario de manantial puro que nace en el cercano monte de San Julián. El Balneario de Fitero combina piscinas termales con sauna finlandesa y baño turco.
Sus aguas mineromedicinales, recomendadas para tratar dolencias reumáticas y de circulación, resultan muy suaves al tacto. El propio edificio, con sus columnas clásicas y salones de mármol, aporta un toque de solemnidad al descanso.
