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Los robos de vehículos están a la orden del día, ya que, solo en nuestro país, se interponen miles de denuncias de robo al año ante las autoridades, por lo que todos los días alguien es víctima de este tipo de actos delictivos. Además, se considera que, el porcentaje de volver a ver tu vehículo después de ser robado es tan bajo que sólo uno de cada diez logra volver a recuperarlo.

Por supuesto, para prevenir los robos de vehículos, lo más efectivo es aparcar las motos y los coches en garajes o aparcamientos privados o de uso restringido. Por supuesto, no todo el mundo tiene la suerte o el privilegio de disponer de este tipo de espacios para poder dejar su vehículo a buen recaudo y sin estar expuesto en la calle, que es donde tienen lugar la mayoría de los robos.

Por ello, si no te puedes permitir enfrentarte al pago de un garaje privado o al alquiler de una plaza en un parking, en este artículo te vamos a dar otras soluciones a las que puedes recurrir para proteger tu vehículo de estos actos. Sigue leyendo este artículo de CarKeySystem.com si quieres conocer los distintos tipos de sistemas de antirrobo de moto a los que puedes optar para garantizar tu tranquilidad mientras tu moto descansa en plena calle.

Sistemas de antirrobo con cadenas

Se trata de una de las opciones más recurrentes y tradicionales que puedes encontrar para evitar el robo de tu moto y una de las soluciones más efectivas. Este sistema está formado por unas cadenas metálicas —generalmente, de acero— que cuentan con un sistema de cierre con un candado de alta seguridad.

Para proteger la moto de los robos, tan sólo debes amarrar una parte de la moto a un elemento fijo que forme parte del mobiliario urbano, como una farola o un poste, por lo que es ideal para usarlo en la ciudad. Si no dispones de ningún elemento fijo, puedes utilizarla para unir el chasis de la moto a una de las ruedas para bloquearla y evitar que nadie se la pueda llevar.

Sistemas de antirrobo de disco

Es un tipo de sistema de antirrobo mucho más pequeño y ligero, lo que hace que sea uno de los más utilizados y seguros en la actualidad, ya que lo puedes llevar en la propia moto, no pesa nada y cabe en cualquier sitio, además de instalarse sin complicaciones. Podemos decir que se trata de un aparato que se debe instalar en los discos de freno delanteros de la moto y que se usa para bloquear las ruedas.

Ahora bien, no debes olvidar que está puesto antes de poner en marcha la moto, ya que esto puede causar daños graves tanto en el disco como en las pinzas de freno de tu vehículo. Algunos modelos pueden incluir alarmas de antirrobo luminosas y acústicas para alertar en caso de intento de robo.

Sistemas de antirrobo articulados

Son muy parecidos a los sistemas de antirrobo con cadenas, ya que su funcionamiento es idéntico. Sin embargo, suelen ser más efectivos, ya que cuentan con un cable recubierto por piezas metálicas y por un tubo de plástico. Gracias a ello, las piezas metálicas no están expuestas al aire libre y, por lo tanto, no están tan expuestas a la corrosión ambiental. Por ello, este tipo de sistemas antirrobo son una opción más robusta y sólida que el anterior y, por lo tanto, más efectiva frente al robo.

Sistemas de antirrobo de horquilla

También conocidos como “Sistemas de antirrobos en U”, se trata de un método de prevención frente a los robos que está compuesto de una barra metálica en forma de U alargada y que se cierra por uno de los extremos, casi como si fuera un candado gigante. Se suelen utilizar para bloquear las ruedas delanteras o para unir la horquilla de las motos con una de las ruedas para dificultar que nadie se la lleve.

Además, también se pueden utilizar como se usan sistemas articulados o de cadena, ya que es posible amarrarlos a algún elemento fijo del mobiliario, como una farola, una señal, árbol o poste. Incluso algunas personas lo combinan con uno de estos dos sistemas antirrobo para proporcionar mayor tranquilidad mientras la moto reposa en la calle.

Sistemas de antirrobo de manillar

Es un sistema de antirrobo que se suele utilizar en motos de tamaño reducido, como, por ejemplo, las scooters. Para proteger la moto de los robos, fija el extremo izquierdo del manillar con cualquier área fija de la moto, normalmente, junto al eje de las ruedas. Gracias a ello, el manillar queda torcido y no se puede enderezar, lo que dificulta enormemente el robo de este tipo de vehículos.

Sistemas de antirrobo fijos o Wilock

Se trata del tipo de sistema de antirrobo que proporciona mayor seguridad, pese a que también suele ser el más caro. Se suele instalar en plazas de garaje compartidas y requiere de la realización de una instalación fija en el suelo. Es un armazón metálico que se utiliza para anclar y bloquear la rueda delantera de la moto cada vez que aparcamos. Su desventaja radica en que no podemos utilizarlo en la calle, sino en un aparcamiento de uso restringido, como el que utilizan los vecinos en el sótano de un edificio.

Sistemas de antirrobo con alarma

Se trata de un tipo de sistema que se suele instalar en las motos y que emite una alarma luminosa o sonora que se activa al mover la motocicleta sin haberlo desactivado antes. No evita el robo, sino que alerta de que este se está produciendo en el mismo instante. Por ello, se aconseja combinarlo con cualquiera de los otros sistemas que hemos mencionado más arriba.

Sistemas de antirrobo con localización GPS

Al igual que el anterior, no evita el robo, sino que incorpora un sistema de localización GPS que indica en qué lugar se encuentra la moto robada. De esta manera, puedes utilizar una app de seguimiento o un programa de ordenador para rastrear dónde se encuentra y ponerlo en conocimiento de las autoridades en caso de producirse un robo. Por supuesto, te recomendamos combinarlo con cualquiera de los otros sistemas de antirrobo de los que hemos ido hablando a lo largo de este artículo.